Cuatro ojos ven más que dos. ¿Incluso a una distancia de mil kilómetros? A partir de ahora, esto será posible en poco tiempo con la automatización aumentada. La solución consta de las gafas de datos y la TI asociada, incluidas las aplicaciones. En la práctica, puede verse así: un técnico de servicio tiene que reparar una falla en un sistema.
Se pone las gafas de datos, se autentica y se comunica a través de un portal central por audio y vídeo con el especialista de la empresa, que conoce mejor la configuración individual del sistema. El experto de la empresa ve y escucha lo que el colega está haciendo en el sitio y puede enviarle diagramas de circuitos u otra información útil a las gafas de datos para ayudarlo. Juntos solucionan el problema.
Gafas de datos inteligentes como parte de la transformación digital